El corcho es un material vegetal mediterráneo, la envoltura y la protección del alcornoque, que tiene propiedades únicas que lo distinguen en el ámbito del aislamiento térmico.
Su estructura, en efecto, se caracteriza por una geometría de panal cuyas cavidades están ocupadas por aire, lo que da lugar a un material muy poroso y ligero, elástico, compacto y capaz de aprovechar las capacidades aislantes del aire incorporado.
Utilizado para el aislamiento térmico y acústico, tanto en el interior como en el exterior de los edificios, como en las soluciones Diasen, el corcho cuidadosamente seleccionado y tratado garantiza una protección duradera, sin alteraciones debidas al paso del tiempo y sin emisión de polvo o sustancias peligrosas.
Como es sabido, el aislamiento térmico, tanto en invierno como en verano, de los edificios existentes y nuevos es una de las características fundamentales que repercuten en el confort de la vivienda y en el ahorro de energía. Pero, ¿cuáles son los parámetros que alinean el ahorro energético y el confort térmico?
En primer lugar, encontramos la transmitancia térmica, que permite medir la dispersión térmica a través de la envolvente del edificio; es un parámetro estacionario directamente correlacionado con la reducción del consumo energético y actúa sobre la temperatura de la superficie, elemento central del equilibrio termohigrométrico y factor de salud y bienestar en los ambientes.
La inercia térmica de un edificio, en cambio, consiste en su capacidad, a lo largo del tiempo, de retener el calor dentro de las paredes una vez que el sistema de calefacción está apagado, reduciendo y retrasando el efecto de las tensiones externas (cambio de fase).
La difusividad térmica es el parámetro que mejor indica la eficacia del edificio en términos de protección térmica, ya que proporciona la respuesta cuantitativa de cuánta energía térmica se bloquea y cuánta se retiene en el material, evitando así la sobrecarga de la estructura del muro.
Ya hemos mencionado el tema de las tensiones, que pueden dividirse en dos categorías diferentes
el estrés térmico externo, es decir, la combinación de la temperatura externa y la componente de radiación externa
el estrés térmico interno, es decir, la radiación solar (que, por ejemplo, también proviene del acristalamiento) o el sistema de calefacción/refrigeración.
Les biomaltenes de la ligne Diathonite combinent une faible transmittance thermique et une faible diffusivité thermique en un seul produit ; des propriétés qui les rendent idéales pour améliorer les niveaux et les perceptions de confort, ainsi que pour des mesures d’économie d’énergie rentables et structurelles